Casa del Muffin

Este es un pequeño espacio personal, mi asilo mental; lo compartiré con ustedes, disfruten con un muffin en mano y una rica taza de té (:

sábado, 27 de abril de 2013

Dibujos II


Hace unas semanas atrás, iba a continuar con mi hobbie de dibujar, sin embargo noté que mis hojas con mis dibujos desaparecieron, y aún no las encuentro, es una lástima porque ahí estaban mis primeros dibujos y un par que le iba a regalar a unos amigos que dibujan y me motivan a seguir dibujando, como sea, deberé de empezar otra vez.

Les traigo la segunda entrada de mis dibujos, continuación de Dibujos de vacaciones  del año pasado.

 Este es el primer dibujo que hice de modo más "profesional". Me gusta tratar de hacer las características lo más realistas posibles, y sobre todo, me encanta lo que transmiten los ojos, cabe añadir que este primer dibujo que hice de Lana del Rey, lo hice antes de siquiera saber quíén era, los cual hace que me agrade más, aunque en realidad Lana del Rey no me gusta. Pero poder hacer la mirada a mi modo y que se prestara a mis propósitos es lo mejor.





El segundo dibujo que hice quise que fuera de un hombre, y me gustó, la expresión no es la misma que la del dibujo original, y quizás los labios tampoco lleguen a convencerme del todo pero en fin, fueron mis primeros dibujos serios.

Este es el tercero que hice, y me costó mucho hacer que las lágrimas se vieran reales, creo que expresa bien una etapa de mi vida, jajaja, pero bueno, creo que cada vez va mejorando, me gustaría meterme a clases de dibujo y aprender bien el arte de dibujar. Hay otros dos dibujos que terminé después de este, uno de ellos es realmente muy especial, porque lo hice para una amiga por el día de su cumpleaños, es una persona hermosa y quise hacer su retrato. 

Ojalá pueda encontrar mis dibujos terminar los que tenía pendientes, si no, ya hay unos cuantos que tengo en mente empezar.

domingo, 21 de abril de 2013

Las penas que valen la pena

La lucidez de la que disfruto ahora no es en vano, ni producto de las fuerzas al azar de la naturaleza ni del destino. Por fin me hallo en un lugar a partir del cual puedo seguir, no me siento perdida, me siento encontrada. Que las cosas tuvieran que estallar y ponerse lo más feas que hayan podido, vaya que no fue en vano. Las cosas que no se trataron hace años han quedado sanadas. Las cuentas pagadas, ¡como debía ser!

Hoy me di cuenta de que es curioso, que el día en que tuve conocimiento pleno de qué estaba mal y comenzara esta etapa de "sanación", inicié con un libro Recuentos para Demián. Y hoy que me siento ya plena, estoy a punto de terminar un libro que me dejó muchos aprendizajes, Demian.

En definitiva, creo que un Demián cambió mi vida, pero la cambió porque yo lo permití y actué con lo que tenían para ofrecerme.


Si en un futuro, vuelvo a caer en una etapa de miseria personal, al menos tendré la esperanza de que tarde o temprano, podré volver y estaré mejor que antes, haré lo que sea necesario y dejaré que las cosas fluyan en su curso natural, porque hay fuerzas que por más que lo intentemos y pongamos todo nuestro empeño, no podremos cambiar, así que haré mi parte.

Se me da mejor pensar que vivir, pero ahora quiero vivir lo que pienso, en definitiva.


martes, 16 de abril de 2013

Convicciones

Antes creía que si dudabas de una convicción, no valía la pena que siguieras con ella.

Así se resume el pensamiento de mi infancia, perseverante, inmerso en lagunas de "deber" más que de querer. Los preceptos  que repetidos en mí configuraban mi actuar, no revelaban más que ideales, no vanos, pero carentes aún de firmeza y objetivo.

La duda me ha salvado de estancarme en el viejo régimen de mi ser. Si nunca hubiera puesto en cuestión aquellos, ¡vaya de mi! Por la salud del mundo hubiera sido mejor abandonarlos por completo. Cuestionarlos me hizo pensar en si valía la pena seguir y cuál era el propósito de llevar mi línea de vida así, tan firme, tan recta, tan distorsionada del mundo palpable y real. Ahora, creo que si vuelvo a ella, será con más firmeza y compromiso que nunca, lo habré considerado bien y tendré en mente, los argumentos para defender mi actuar. Vaya con las convicciones, si el hombre no duda de ellas, mejor que no las siga nunca!